Una experiencia para abrir el corazón

En una clase intensiva de 3 horas, Patrick y su equipo de asistentes nos guiaron a través de un profunda experiencia de sanación.
La clase empezó con asanas, tal como todos lo esperábamos. Patrick Broome nos guío por un flow de posturas con el sonido de una tanpura, donde cada movimiento era sincronizado con la respiración.
Luego empezaron las sorpresas: tuvimos una excelente clase de masaje tailandés dada por uno de sus asistentes. Cada uno de nosotros eligió un compañero para dar y recibir. Al momento de dar el masaje no había que concentrarse sólo en los movimientos del cuerpo, sino en dar amor a través del tacto, accionar desde el corazón. El cuidado para moverse alrededor de quien estaba recibiendo y el toque amoroso, traían toda la atención al momento presente. Al momento de recibir había que relajarse y soltar el control. Aprendimos a observar el propio cuerpo y las necesidades diferentes de otros cuerpos. Fue una poderosa experiencia para dar y recibir con amor.
Después del masaje buscamos elevar la energía, bailando libremente al ritmo de música africana. Cada uno se expresaba como quería, dejándose llevar por la música. Bailar de esta forma, en una sala llena de personas moviéndose alegremente, fue muy liberador.
En la siguiente parte de la clase, nos sentamos en meditación, escuchando una música emocionante y suavemente golpeándo con el puño la zona del corazón. Escuchamos una grabación del latido del corazón de una mujer embarazada, percibiendo cómo nos sentíamos cuando eramos bebés, dentro de su útero.
Luego comenzamos a darnos abrazos, a nosotros mismos, envolviéndo nuestros brazos detrás de nuestras espaldas y hombros, imaginándo que estábamos abrazando a personas que queríamos mucho. El momento más emotivo, fue el de abrazar a nuestro niño interior, y pude oír a varias personas llorando y sanando.
Al levantarnos luego de savasana, nos esperaba un hermoso Kirtan, para cantar desde el alma, todos juntos.
Sin dudas fue una experiencia intensa, hecha para abrir nuestros corazones. Salimos de la sala flotando y con inmensa gratitud a este maestro y su equipo.
Source: BYC Blog